RON COMPUESTO: CONTRA

 Solución milenaria para los dolores y otras enfermedades

El Ron compuesto o Contra, es una mezcla ancestral con finalidades curativas o rituales, producto de una combinación de licor con un cóctel de tallos, raíces y plantas medicinales. Algunos aborígenes o rezanderos lo emplean en baños rituales contra maleficios, como la mala suerte, el mal de ojo, la infidelidad...

Este menjurje junta el poder de las plantas medicinales de uso inmemorial, en porciones que nadie sabe sobre su exacta cantidad o composición. Y a pesar de que esta práctica no posee la relevancia del pasado, y de los adelantos de la medicina convencional, su uso continúa extendido en la Costa Caribe colombiana, sobre todo en la parte rural, campesina o de cultura aborigen.

Tradicionalmente es empleado para un sinnúmero de patologías, principalmente para curar las dolencias musculares, de los huesos, de la cabeza, o del estómago, así como para la revertir la fiebre. De igual manera es utilizado como medicina expectorante, o para tratar el reumatismo, la artritis, el guayabo, la lombriz de estómago, la gastritis, y la eliminación de toxinas, entre otras. Por otra parte los rezanderos lo usan como antídoto para las picaduras venenosas tanto de culebras, rayas, arañas y avispas, y los sobanderos para aliviar los golpes, las torceduras, y el resto de inflamaciones musculares etc.

COMPOSICIÓN

La Contra está compuesta por media botella de Ron, ya sea de Ñeque, Caña o Chirrinche, mezclado con algunos tallos y raíces de plantas medicinales como: la chuchuguaza, árnica, ruda, marihuana, malambo, ararat, romero, caspin, clavos de olor, romero, cedro, canela, paico, curarina, tabaco, concha de guásimo e incluso alcanfor para hacerlo un poco más placentero cuando deba ser bebido, ya que el resultado de esta mezcla es una pócima muy amarga de difícil sorbo. 

Todos estos ingredientes son envasados en una botella reciclada, en proporciones que le den cabida a la variedad de componentes. Algunos abuelos le agregan el “secreto ancestral” para adicionarle poderes mágicos.

Este compuesto no faltaba en ninguna casa costeña, los abuelos lo consideraban el mejor analgésico y desinflamatorio del mundo.

Al ser una receta tradicional no existe una fórmula estandarizada de las porciones exactas de sus componentes, por lo regular la media de ron y las plantas descritas, incluso otras dependiendo la región, son mezcladas en cantidades cuyo límite es el tamaño del envase.

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